Los invitan a dar charlas, algunos hasta están de panelistas en la radio. También las marcas les tratan de sacar una opinión acerca de sus productos. Aquí sus testimonios.
Gabriela Bade
No surgieron en la "tele" ni en la radio. Cada seguidor nuevo que suma a sus cuentas de Twitter y de Facebook o cada comentario que llega a sus blogs es producto de una fama hecha posteo a posteo durante años. Lanzando ideas, noticias y haciendo que su firma se transformara en un referente en internet.
Paloma Baytelman, por ejemplo, está en un punto tal que cada día cuando abre su cuenta de Twitter aparecen entre 100 y 200 seguidores. En marzo tenía 10 mil y ahora, ya va en 17 mil 909. Ella es periodista y consultora independiente, experta en medios digitales. Se dedica a asesorar a empresas e instituciones sobre cómo sacar provecho a estas redes.
Y habla en buena parte desde su propia experiencia, pues desde que abrió su blog ( www. paloma.cl ) en el año 2004, su nombre ha ido creciendo en la web. Ahora además tiene un espacio de entrevistas en su blog, PalomaTV.
En marzo, tras el terremoto, fue invitada en calidad de "medio" independiente por un ministerio a recorrer varias localidades arrasadas, desde donde transmitió imparablemente por Twitter. Este año, además, fue seleccionada por el gobierno de Estados Unidos para el primer Social Media Tour, con 30 periodistas digitales de todo el mundo.
"Me encanta compartir y evangelizar sobre el uso de las nuevas tecnologías, porque entregan súper buenas oportunidades", dice.
Para ella todo lo que hace a través de sus redes sociales le genera un círculo virtuoso. "Al principio tenía ganas de compartir lo que vivía y me empezaron a invitar a dar charlas en universidades y colegios. Ahora hago también talleres y asesoro sobre marketing digital y redes sociales".
Roberto Arancibia hizo el mismo camino. En estos días su blog (elmundosigueahi.blogspot.com) ya cumplió siete años y es un confeso enamorado de las redes sociales. "Un día descubrí esto de la internet y me cambió la vida". Él habla de su blog , que inició en medio de una crisis personal a los 43 años.
"En la vida real soy un publicista, hago producción de eventos. Tengo 50 años, dos hijos. Las redes sociales nos han cambiado a todos los que las vivimos. Nos han cambiado la formas de enamorarnos, de trabajar, de comprar, de vivir".
Tanto entusiasmo lo ha llevado lejos. Incluso a ganar más plata. Haciendo charlas, seminarios o presentaciones. "Me llego a reír. Te conviertes en una voz válida. No sé si eres influyente o referente".
Para él es necesario separar espacios. "No vivo del blog ni de la red. A mí me importa que estas redes te sirvan para tener emprendimientos fuera y eso es lo que he hecho".
Cristián Labarca, que es otro hijo ilustre de la internet 2.0, sí vive de sus emprendimientos digitales. En su blog Huasonic.com, desde hace cinco años, habla de tecnología y sí es una de las voces más valoradas en esta área. También lo invitan a eventos, da charlas y hace asesorías en estos temas.
Y sí, fue Twitter la plataforma que le dio el empujón final a la fama. Actualmente tiene 10 mil 190 seguidores, decidió renunciar a su trabajo estable y armó su propia agencia, Bowl. Desde ahí, junto a su socio Juan Pablo Tapia, se ha convertido en una especie de "rostro" digital de LG y también participa en los blogs de VTR. Su empresa, en apenas dos meses, ya les dio trabajo a dos personas además de sus dueños.
"No soy el twittero con más seguidores, ni hago ningún esfuerzo por ser como soy en los medios digitales. Esto es súper entretenido. Y lo mejor que he logrado con el tiempo es que soy la misma persona digital que en la calle. Es súper choro ir por la calle y que me saluden".
Global VoicesLa próxima semana, los días 6 y 7 de mayo, Santiago será sede del encuentro internacional "Global Voices", que reúne a más de 200 personas, principalmente blogueros, que se han constituido como medios ciudadanos. En esta oportunidad también hay un concurso en marcha: "Chile post terremoto, la reconstrucción en un post" y está dirigido a todos los blogueros chilenos mayores de 18 años.
La idea es mostrar la situación del país luego del terremoto y fomentar la mirada positiva de la reconstrucción.
